miércoles, 10 de mayo de 2023

10 de mayo

 Hoy es un día especial para aquellas que fuimos bendecidas con la maternidad. No sólo quiero felicitarlas a cada una. Quiero en especial dedicar este escrito a tres personas que me hicieron entender el amor incondicional, el perdón, la nobleza y la solidaridad: mis hijos.

Por alguna razón quisieron que está mujer fuese su mamá. Es cierto que vinieron a voltear mi mundo. A sacarme de mi zona de confort. Pero al mismo tiempo me  ayudaron a conservar esas cosas que te dicen no están bien en un adulto.

Gracias a ellos seguí siendo una niña y más cuando de caricaturas se trata y de juegos. Conservé mi risa escandalosa; mi curiosidad y mi capacidad de asombro. Seguir bromeando y reír de las cosas simples. No necesitaba estar presentable para que me dijeran que soy bonita. Ni peinar mi cabello o maquillarme. Gracias a ellos me sentí la mejor mamá del universo!!!

Me enseñaron a ser paciente. A ser más noble. Más juiciosa. Menos impulsiva. A escuchar con más atención. A entenderlos en sus diferencias y a amarlos como loca aún en sus malos días. Que podía hablar con ellos en vez de imponerme. Que pasar un día en pijama viendo películas y atacarnos de palomitas estaba más que bien!!! Que cantar en el auto con toda la pasión me alegraría el día y el tráfico pasaría a segundo plano.

Que comer helado, chocolates, skwinkles; fruta con chile, limón, Tajín y chamoy es un manjar; que desahogarse cuando se tiene un problema, un enojo es sano; que leerles en las noches serían de los mejores recuerdos; que jugar con ellos juegos de mesa sería mi bullying de por vida. Que cocinar todos juntos y quedarse en la sobre mesa reforzaría nuestros lazos. Que tener un momento para cada uno sería el día perfecto. 

Me enseñaron la nobleza al extremo. El amor incondicional. La solidaridad. Que llorar frente a ellos estaba bien. Que no necesito ser wonder woman, que puedo ser vulnerable frente a ellos. Que pedirles perdón no me quitaba autoridad ni respeto. Me enseñaron que el amor no se va cuando te enojas, regañas o castigas. Me enseñaron a ser fuerte ante la enfermedad y el miedo. A ser menos aprensiva ante sus aventuras y experimentos. A ser más abierta a nuevas ideas. Me enseñaron a ser más creativa. Me enseñaron que tener miedos ni estaba mal, que era humana como todos y que no estaba mal serlo.

Sé que venirme lejos de ellos fue muy fuerte y fueron sin embargo nunca me dijeron no lo hagas. Al contrario, me han alentado siempre aún a pesar de mis errores. Aún a pesar de haberlos lastimado y decepcionado. Han estado siempre apoyando a esta loca. Queriéndome. Apostando por mí.

Hoy me siento la madre más afortunada. Tengo tres tesoros que me eligieron a mí!! A pesar de todos mis defectos y miedos; quisieron que yo estuviera a su lado. Este día es por y para ellos. 

Gracias Rosy, Luisa, Miguel por tanto amor, risas, experiencias, vivencias, recuerdos, regaños, ejemplos, enseñanzas. Por estar aquí y por ser esas personas tan maravillosas. Estoy orgullosa de lo que logrado. De lo que son y de lo que dan a los demás. 

Gracias por permitirme celebrar este día a plenitud.